“Fieles al carisma de nuestro Fundador, nuestra vida como la de Jesús quiere ser expresión del amor de Dios por los pequeños, los débiles y los despreciados de la sociedad…”
Para las hermanas de Ntra. Sra. de la Compasión, seguir el camino de Cristo, a la luz del carisma recibido de su fundador, no consiste en hacer cosas extraordinarias sino en asegurar un servicio paciente y compasivo a los demás. Las obras de educación, el cuidado de los pobres, la misma vida comunitaria, suponen el olvido de sí mismas y una vida espiritual hecha de sencillez, abnegación, humildad y de un amor que se entrega en la comunión con los que sufren y en la solidaridad con quienes trabajan para que desaparezcan las causas que generan la injusticia.
Como María al pie de la Cruz, quieren servir a la humanidad con un corazón grande y compasivo, de forma especial a la humanidad sufriente, dejándose transformar por el Espíritu para vivir:
- En una actitud contemplativa que permite descubrir a Dios presente y actuando en la historia y en la propia existencia.
- Con una especial sensibilidad a toda situación de debilidad, pobreza y sufrimiento.
- En disponibilidad, acogida y sencillez que les hace cercanas a los demás.
- Desde un dinamismo creativo en el servicio al prójimo.
Hacia el año 1983 surgió en la Congregación la preocupación de cómo ayudar económicamente a las situaciones de precariedad que existían tanto en España como fuera. A partir de esa inquietud se formó una comisión, que se llamaba ‘la Comisión de Comunicación de Bienes’; es cierto, que en aquel momento la mayoría de las Hnas. estaban en activo y cobraban un sueldo profesional, eran muy pocas las que cobraban la pensión, de ahí surgió la reflexión sobre la solidaridad y decidieron emplear un porcentaje de lo que se recibía en la Administración Provincial para Proyectos a favor de los más pobres y desfavorecidos.
En la medida que iba pasando el tiempo, y gracias a las reflexiones que hacían, así como a la experiencia de otros, vieron la necesidad de estudiar algo nuevo y distinto. Entre otras, una de las causas por las que les llevó a esta reflexión, era que empezó a aparecer la dificultad en la Congregación de que no podía aportar todo lo que estaba haciendo hasta entonces, porque la situación se iba cambiando y los sueldos iban bajando y las pensiones eran las mínimas.
Después de un periodo de trabajos y consultas se pudo elaborar definitivamente el Proyecto de Solidaridad Compasionista de España, SOCOES, quedando constituido en el año 2000.
El 26 de Enero de 2002 se hizo en Córdoba el I Encuentro de Voluntarios, en los que estaban Hnas. y laicos, fundamentalmente para dar a conocer la Propuesta de la Congregación, para estudiar juntos cómo se entiende la solidaridad y ver de qué forma se puede continuar en este caminar.
En Octubre del 2002 se vio la necesidad de convocar un II Encuentro con el fin de continuar profundizando en la formación del camino del Voluntariado Compasionista.
Los miembros de la Comisión son 4 Hnas. y 2 laicas, que una de ellas es una profesora de Mª Corredentora. La dedicación en la Comisión no sólo se limita a aprobar o no proyectos sino también a la Formación de los miembros e incluso a enviar materiales de formación, tanto a las Hnas. de las cdades. como a los voluntarios.
SOCOES, no es una ONG, sino algo parecido que desde la Congregación se veía importante hacerlo.